La publicidad anti tabaco es muy ingeniosa, tristemente es poco efectiva, no transciende lo suficiente por los fumadores cada vez son más, a mí, en mi etapa de fumador, nunca me causo impresión alguna el ver alguna de estas imágenes, veía los anuncios como mensajes dentro de una botella que se tiran al mar esperando encontrar a alguien. La nicotina es sumamente poderosa y adictiva, el ingenio grafico está muy lejos aún de derrotarla, pero se agradece ampliamente el esfuerzo por una causa noble como es el no fumar.
Les dejo unos ejemplos de publicidad relacionada con el abandono del tabaco.
Me siento raro siendo ahora un defensor del abandono del tabaquismo, no lo niego, pero yo ya estuve ahí, fume durante 15 años de mi vida, una cajetilla al día o lo que es lo mismo, me fume 5475 cajetillas de 20 cigarros (comprar de 14 cigarros siempre se me hizo de jodidos…) lo que se traduce en 109 500 cigarros en mi vida. Cigarros mas o cigarros menos, no puedo ser tan exacto en la cuenta, pero en definitiva si me he fumado más de 100 000 cigarros en mi vida.
Este domingo 15 de noviembre, termine mi tratamiento de abandono de nicotina, desde ese día ya no uso el parche de nicotina, desde ese día vivo libre de nicotina y mi cuerpo no lo ha resentido ni la ha buscado, digo, de no ser porque a veces me da por oír voces que me pide que mate a todos en el quirófano por un cigarro…. Jajaja. La verdad es que me siento de maravilla, respiro mejor, la comida me sabe mejor, y no me volví loco de ansiedad. Solo una vez tuve que salir de una fiesta donde todos estaban fumando por la ansiedad de volver a tomar un cigarro. No lo hice, resistí, respire hondo, y volví a la fiesta (con un chingo de chicles en la bolsa y en la boca…) y no claudiqué, y no pienso recaer, el pensar “nada mas un cigarro y ya” o “nada mas un toque para calmar el ansia” es ir derrotado de antemano a la batalla, porque rendirse en “pequeño” es después rendirse en “grande” y volver a traer una cajetilla de cigarros en la bolsa.
Y yo que nunca, ni siquiera en sueños, había pensado en dejar de fumar, y durante esos 15 años no hubo un día que no fumara, así estuviera enfermo con tos, fiebre y con el malestar general, así me tuviera que salir al frio rondando los cero grados, o a mitad de la lluvia torrencial iba fumando en el carro con el vidrio abierto mojándome todo (menos en cigarro), antes de desayunar fumaba, antes de dormir también, fumaba antes de jugar futbol y por supuesto que lo hacía después. Si antes era un adicto empedernido y feroz ahora puedo decir con gusto, llevo más de 2 meses sin fumar y tengo la idea de morirme sin volver a fumar.
En las Crónicas Del Ocio ya no fumamos, solo seguimos escribiendo pendejadas de vez en cuando.
P.D. Víctor, quizás algún día corra un maratón, pero eso no era parte del trato, jajaja, tu sigue juntando lana.
Crónicas del Ocio 